El promedio de integrantes de una familia en México es de 4 personas por hogar constituidos por el padre, la madre y dos hijos que por lo general son de distinto sexo. Al pensar en invertir en un bien inmueble para asegurar un patrimonio estable y sin grandes fluctuaciones en el precio, la preferencia se inclina hacia casas que cuenten con tres recámaras para garantizar la privacidad de cada uno de los miembros de la familia.
Dependiendo del presupuesto con el que se cuente, la cantidad de opciones para adquirir una propiedad de tres recámaras es sumamente amplia, se encuentran casas de interés social que pueden ser adquiridas mediante créditos institucionales o bancarios así como lujosas residencias ubicadas en las zonas con un alto valor comercial. Los inmuebles con estas características de forma común están edificadas en dos plantas que se distribuyen en áreas comunes familiares entre las que se encuentra la sala, cocina, comedor y medio baño, en tanto que la planta alta contempla las tres recámaras y por lo menos un baño completo. En las casas residenciales las dimensiones son mucho mayores y el área de las recámaras también, pueden incluir dentro de cada una de ellas un pequeño estudio para los jóvenes o niños. Para adquirir una propiedad acorde a las necesidades de cada familia lo recomendable es la asesoría de empresas dedicadas a los bienes raíces ya que poseen un amplio catálogo de propiedades de tres recámaras que se adapta a la capacidad de compra del inversionista.